LA TELE CANARIA

Creo que si hay algo que retrata la mediocridad del tiempo actual, o tal vez no se llega ni a eso, es el ente (así se llamó) que hoy es la Nuestra, la Televisión Autonómica Canaria, junto con su emisora de Radio. Hoy intentaré escribir sobre la Tele, y la Radio la dejamos, de momento, pero ya hablaremos de ella, antes de que despidan a la mitad menos uno, de sus trabajadores.

Y la Tele Canaria retrata a un sector del pueblo llano que sabe que es así pero se resigna, conforme con estar escapando, subterfugio que se usa,  pa mi que sin meditar lo que significa y, si no, leamos cualquier día la programación de esta casi (…) obscena empresa pública que pagamos todos para darnos cuenta de la degradación a la que hemos llegado con nuestro consentimiento. Desde el amanecer con los buenos días que no lo son, porque siempre hay una enfermedad, dos o tres agresiones, un par de robos y tertulianos – no sé si cobran por decir nada – que están ahí, opinando que es una frase hecha. Y como siempre tienen prisa – sobre todo en la Radio Autonómica, La alpispita lavandera – porque hay que pasar  a la emisión de los deportes, el tiempo o el volcán o a las finas telenovelas procedentes del malandraje que nada tiene que ver con México lindo y querido o con Venezuela( antes la octava isla), tan violenta, dicen ahora los arrechados, pero que poco o nada tendría que ver que ver con nosotros si se le explicara algo de historia y que se cobrara una tasa para hablar por los celulares o que definan, de oídas por fortuna, lo que fue una plaga de cigarrones, que ocurrió.

Hoy, por ejemplo, en la Autonómica, hay cine sin cortes (técnicamente hablando, porque cortes sangrientos sí que hay) y lo peor del panorama que se mete por las puertas de los hogares isleños, para educar a la cantera. Los zetas, que antes eran unos polvos, o los salvatruchas. O los Guachipanduzy. Maras al fin y al cabo. Y  La Gala, una aberración que, sin embargo, tiene su público.

Pues a lo mejor habría que cerrar esta ventana (…) que nada bueno aporta a Canarias; más bien al contrario. Véase, a proponer, alguno de sus costosos programas que ya no le hacen gracia ni al más bobo del pueblo: “La Gala”, “Clave de Ja”, “La Revoltosa” y otras parrandas aburridas. Sin contar con que transmiten fútbol peninsular que a nada conduce. Y qué decir de la sonrojante repetición de series antiguas, de presentadores de asuntos culinarios sin tener idea de cocina, o transmitir telenovelas  que ofenden a cualquiera que aspire a que su tierra salga de lo que tiene que salir, de la segunda B, como la programación de una empresa pública que me da, a mi, vergüenza como canario. Bueno, el jefe se llama Willy y tiene mucha nieve en el semblante y fuego en la mirada. No rima pero es verdad.

Como si fuera o fuese una letanía, leamos ahora mismito la parrilla que nos ofrece La Nuestra: “El gusto es mío, Machos, Cifras y letras, Canarias express (repetida hasta la extenuación), Telenoticias, TN deportes, el tiempo, Cine, Buchanan cabalga de nuevo, Canarios por el mundo (que parecen felices aunque quejándose de frío), Canarias express otra vuelta, Hamburgo 112, Walter, Texas Ranger (uno que da morretadas como si fuera un canario peleón), Telenoticias, TN deportes (no falla), el tiempo (sí falla), Cine el que se le atraviese a don Guillermo, etc. Y mañana más.

Es decir: una desvergüenza que debería cerrarse después de un ERE (ya lo han hecho), porque nos mal educa y lo saben, hasta Paulino, que se da cuenta tarde de lo que ya no tiene remedio.: ahora el presi habla como Felipe en sus años buenos, después de una relación con el fascismo regional, un armador (…) que se afeitó el bigote y que ha comprobado que los llamados socialistas son unos corderitos. Y que Soria, el ministro - ¿qué será de ese cuerpo? – se afeito el bigote de toda la vida, inmediatamente después de que su amado líder se desprendiera de ese apéndice capilar que sólo sirve a ratos. Una comprobación tardía de la lucha de clases: el maestro de escuela siempre fue despreciada por los colegios de pago. Nacho es licenciado en derecho (…), ojo, muy leal, noble e invicto. Como Santa Cruz.

Regresamos pues, a la Tele Canaria que, reitero, hay que cerrarla o reinventarla. Vano intento, pues nadie protesta porque transmitan un partido de fútbol entre dos equipos de la Península, o porque sigan emitiendo La Gala o Clave de Já. O lo que queda, mintiendo: basta ver a los tertulianos cada mañana.

Y, encima, tenemos dos canales supuestamente públicos que algo de dinero deben costarnos. Pues ahí siguen, obscenamente. Y dejamos lo de Canarias Radio la Autonómica, para un posterior ensayo, si dios quiere.

Desconectemos, como diría una veraneante, y ponernos las pilas. Desconectemos de verdad, aunque no haya mucho dónde elegir a pesar de la infame y exagerada nómina de cadenas o canales, que es igual o peor, porque nada bueno han aportado a esta tierra y sus satélites. Bueno, algunos varones veteranos se sienten de verdad viriles (…) con el aparato con el que, de forma compulsiva practican el zapping  y  cambian a su modo y manera, que es cuándo se sienten los hombres de la casa, siempre que la señora se haya dormido.

Continuará…